Todos hemos tenido un amor de juventud, uno tan profundo y sincero que haríamos lo necesario por pasar un poco más de tiempo con esa persona especial; tomar su mano, besar sus labios, saborear su sangre o arrancar un trozo de su cuello con nuestros dientes. Ese tipo de amor es el cual siente nuestra querida Yen por su compañero de clases Randall, a quien todos llaman Red, el edgy del salón. Justo cuando parecía que sabía todo de este chico, él logra sorprenderla con una nueva faceta.